El desconocimiento sobre la IA profundiza desigualdades y vulnerabilidad social

 

Introducción breve

El artículo analiza cómo la falta de comprensión crítica sobre la inteligencia artificial (IA) genera consecuencias sociales, psicológicas y laborales negativas. Mediante ejemplos actuales, destaca el contraste entre la narrativa dominante, que idealiza la IA como casi humana, y la realidad técnica de los modelos de lenguaje. Además, subraya cómo esta ilusión contribuye a la explotación laboral, la fragilidad emocional y la desigualdad global, particularmente en el Sur Global.


Análisis filosófico

1. Ética y responsabilidad (Hans Jonas)

El texto ejemplifica el “principio de responsabilidad” al evidenciar cómo el despliegue de IA sin una conciencia ética tiene impactos perjudiciales, especialmente en colectivos vulnerables. La explotación de trabajadores en países en desarrollo para entrenar modelos como ChatGPT plantea un problema claro de injusticia intergeneracional y moral.

Jonas diría que la tecnología, al ampliar el poder humano, requiere una previsión ética de sus consecuencias futuras, cosa que aquí se omite.

2. Poder, discurso y conocimiento (Michel Foucault)

La crítica a la narrativa sobre la IA —que la presenta como consciente o emocional— se alinea con la noción foucaultiana de “regímenes de verdad”. Las empresas tecnológicas configuran lo que se percibe como verdadero, moldeando subjetividades, relaciones y prácticas sociales. El texto revela cómo el conocimiento sobre la IA está imbricado en relaciones de poder que privilegian la visión empresarial y ocultan los mecanismos reales.

El discurso de Silicon Valley opera como un dispositivo que organiza la experiencia y legitima prácticas extractivas y alienantes.

3. Tecnología y autoexplotación (Byung-Chul Han)

La sustitución de relaciones humanas por vínculos con IA refuerza la lógica del rendimiento y la desconexión emocional, características de lo que Han denomina la sociedad del cansancio y la autoexplotación. El fenómeno de la “psicosis inducida por ChatGPT” refleja el vacío relacional y la fragilidad emocional que la tecnología intensifica.

Han argumentaría que la promoción de la IA como amiga o terapeuta fomenta una hipertransparencia sin empatía, debilitando los vínculos reales.

4. Sistemas complejos (Edgar Morin y Niklas Luhmann)

El artículo, sin nombrarlos explícitamente, aborda los efectos sistémicos de la IA. Desde la vulnerabilidad cognitiva hasta la reorganización del trabajo y la subjetividad, el fenómeno es tratado como una red de consecuencias interrelacionadas. Morin señalaría la necesidad de un pensamiento complejo para abordar estas transformaciones.

Luhmann vería la “analfabetización en IA” como un fallo en los sistemas educativos y mediáticos para generar observación de segundo orden, es decir, reflexión crítica sobre su propio funcionamiento.

5. Disrupción y simulacro (Deleuze y Baudrillard)

La atribución de rasgos humanos a la IA crea un simulacro (Baudrillard), una copia sin original que suplanta lo real. Las relaciones con chatbots no son solo ilusorias, sino que disuelven los límites entre verdad y ficción. Deleuze podría leer las experiencias descritas como líneas de fuga descontroladas, donde la diferencia radical del pensamiento maquínico es domesticada para sostener una narrativa de poder.

El artículo revela cómo el simulacro tecnológico no libera al sujeto, sino que lo reconfigura en función de nuevos imperativos comerciales.


Conclusión

El texto ofrece una crítica contundente a la instrumentalización ideológica de la IA. Muestra riesgos éticos (explotación laboral, debilitamiento social, delirios colectivos) y denuncia el poder discursivo de la industria tecnológica. Aporta elementos valiosos para un pensamiento crítico interdisciplinario y alienta la alfabetización tecnológica como forma de resistencia.

Oportunidades:

  • Fortalecer la educación crítica.
  • Visibilizar el trabajo humano tras la IA.
  • Construir una cultura tecnológica responsable.

Riesgos:

  • Continuación de la explotación invisibilizada.
  • Aumento de la vulnerabilidad emocional y social.
  • Consolidación de narrativas dominantes no cuestionadas.